HEMEROTECA

A Calzon Quitao's Weblog

Noticias del Mundo para el Mundo

Mujer engañada de Los Ríos capó “de raíz” a su marido luego de que se le fuera una semana con la otra.

20 octubre, 2008

Fuente: Extra.ec

¡Si no eres mío, no serás de nadie…!, fueron las palabras de una humillada mujer que se cansó de recibir maltrato de su cónyuge, quien permanentemente la engañaba con una amante que tenía escondida en el cantón Baba, provincia de Los Ríos.
La nueva “Lorena Bobbit” riosense fue identificada como Daysi Mora, de 40 años, la misma que desapareció como por arte de magia para despistar a la Policía que la busca por todos lados.
La trágica noticia se registró la tarde del sábado, después que Octavio Vera Leen -también de 40 años- llegara en completo estado etílico a su vivienda localizada en el recinto San José, perteneciente a la parroquia Isla de Bejucal.
Los vecinos comentan que la víctima apareció a los siete días, después de estar en los brazos de su nuevo amor. Una vez que subió a la casa de caña para ver a Daysi, el desafortunado infiel recibió la peor condena por su pecado. Sobrecargada de celos por la traición que le había hecho su marido, Mora actuó de la forma más sanguinaria y dolorosa.

Tipo de "curvo". Imagen Google

Tipo de "curvo". Imagen: Google

Utilizó un curvo

En el recinto todos apuntan a que la engañada mujer utilizó un “curvo”, filuda herramienta para desmanar banano. La enfurecida dama esperó a que su confiado marido se acostara a descansar y se quede dormido como si nada hubiera ocurrido.
Inmediatamente la señora empuñó el instrumento cortopunzante y se acostó junto a su marido. Cuidadosamente procedió a desabotonar el pantalón, para acto seguido cortarle el miembro viril de un solo tajo, mientras que gritaba enfurecida que “eso era el castigo por su traición”. No conforme con eso Daysi Mora arrojó el aparato reproductor masculino de su capado conviviente detrás de la puerta del cuarto, para que alguien lo recoja en caso que los médicos lo necesiten para una operación.

Marido capado pidió ayuda
El angustiado marido al verse lleno de sangre y sin su “canario”, salió corriendo bañado en su propia sangre, pero se desmayó cuando intentó bajar la escalera de su casa.
Al escuchar los desgarradores alaridos de Octavio Vera, sus vecinos más cercanos socorrieron al herido, transportándolo en una hamaca hasta la parroquia Isla de Bejucal. Ahí, una camioneta le hizo un flete hasta el hospital Martín Icaza de Babahoyo, donde fue atendido por los médicos del turno. Por la gravedad del corte, se autorizó el traslado hasta la ciudad de Guayaquil donde se encuentra bajo observación médica.
Familiares recuperaron los testículos y el pene de Octavio Vera con la esperanza de que puedan ser reimplantados.
Hasta el recinto San José llegaron corresponsales de varios medios de comunicación nacional, para cubrir la noticia, pero fueron repelidos a bala por parte de Luis Vera, padre del hombre mujeriego, negándose a dar información sobre la desgracia de su hijo.

Extra.ec