El descuartizamiento, nueva marca del crimen en Venezuela
Muchos otros homicidios macabros también acaparan la crónica
roja local
10 de septiembre 2014 -
09:18 am
El propio ministro de Justicia, Miguel Rodríguez, manifestó ante la prensa su “preocupación” por la crueldad de los crímenes. Internet |
El cuerpo de un hombre decapitado encontrado en un alejado suburbio
caraqueño, y horas después su cabeza en otro sector a 30 km de distancia,
marcaron los últimos hallazgos realizados por la policía científica venezolana
que lidia con una de las mayores estadísticas de homicidios del mundo, reseña
AFP.
En sólo dos meses, en distintos puntos de Venezuela han sido encontradas
manos, cabezas, piernas y torsos que se comprobó pertenecían a seis personas
diferentes, lo que reavivó el espanto en una sociedad que parecía anestesiada
frente a la masacre de 70 homicidios diarios según cifras de organizaciones no
gubernamentales.
La saña creciente no se limita a descuartizamientos, y muchos otros
homicidios macabros también acaparan la crónica roja local: mujeres apuñaladas
por sus parejas, un hombre asesinado a golpes, otro de un balazo en la cara
mientras cargaba a su bebé o un hijo que degolló a sus padres.
Para el experto en temas de narcotráfico y catedrático de la Universidad
neoyorquina de Columbia, Edgardo Buscaglia, el Estado ha sido “paralizado en su
capacidad de enfrentar a redes criminales como las que operan en el país (…) y
los delincuentes cometen mucho más daño”.
Este investigador asegura que esa “debilidad del Estado” ha generado que
“haya grupos criminales colombianos, mexicanos, guatemaltecos, operando en
Venezuela”.
El propio ministro de Justicia, Miguel Rodríguez, manifestó ante la prensa
su “preocupación” por la crueldad de los crímenes y precisó que “se está
‘colombianizando’ la actuación de las bandas delincuenciales”.
Rodríguez develó que en distintos operativos policiales entre mayo de 2013 y
agosto de 2014, habían sido capturados casi 13.000 delincuentes e informó que
se desbarataron 255 bandas. Pero, advirtió, aún “quedan 92 bandas (…) de alta
peligrosidad” libres, por la calle.
- Drogas, pasión y más -
A Yesenia Mujica, universitaria de 22 años, la asesinaron en julio y aún no
hay detenidos. La descuartizaron y lanzaron sus restos a un basurero del centro
de Caracas. Allí la hallaron unos indigentes.
El criminólogo Fermín Mármol García dijo a la AFP que el descuartizamiento
de un cuerpo, frecuente en países como México, se explica en problemas de droga
o por crímenes pasionales.
En Venezuela, estas prácticas fueron “excepcionales” en el pasado, pero
ahora se han vuelto frecuentes, asegura, y aparecen dos nuevas teorías.
La primera, el traspaso de la cultura carcelaria a las calles, cuyas reglas
internas impuestas por los pranes (líderes dentro de los penales) y su entorno
condenan a muerte y en ocasiones al descuartizamiento de aquellos reclusos que
violen las normas.
La segunda, la conformación de nuevas bandas criminales juveniles que pretenden
demostrar con la saña que imprimen a sus delitos lo “atroces y sanguinarios”
que son.
Sin embargo, para el ministro Rodríguez tres de cada cuatro homicidios se
explican en enfrentamientos de bandas y el móvil de tres de los seis
descuartizados fue el pasional.
Paralelamente, se han multiplicado los sitios de liberación de personas
asesinadas en Caracas. “La delincuencia se siente confiada, siente que las
posibilidades de ser detenidos por autoridades con un cuerpo en el carro son
muy bajas”, explicó Mármol.
- Planes vs. impunidad -
En este país petrolero, la tasa de homicidios oscila entre 39 y 79 por cada
100.000 habitantes, según cifras oficiales o de las ONG, respectivamente.
“Tenemos una sociedad con mucha más violencia que se agrava por la ausencia
de una respuesta del Estado ante esta situación, la inmensa impunidad -de 95%-
y la notable conciencia que tienen los delincuentes de que no les va a ocurrir
nada”, explica a la AFP el director de la ONG Observatorio Venezolano de
Violencia, Roberto Briceño León.
En cinco meses, el gobierno del presidente Nicolás Maduro ha presentado un
plan de patrullaje en los municipios más violentos y una misión para impulsar
la salida de los delincuentes del mundo criminal a la luz de las protestas
callejeras que reclamaban, entre otras cosas, mayor seguridad.
Pero las políticas parecen dar pocos resultados y el venezolano,
acostumbrado a escuchar historias cada vez más horripilantes, mezcla de miedo y
precaución, ha declarado un toque de queda simbólico en la noche, decidió no
exhibir prendas costosas, nunca se detiene en los semáforos en rojo después de
las 21H00 y tampoco responde llamadas al celular en un sitio público.
“Lo que uno encuentra es que un grupo de la sociedad se ha ido enfermando en
el comportamiento sádico y otro grupo se ha ido enfermando de miedo, ha perdido
su libertad”, concluyó Briceño.
____
Fuente: http://www.el-nacional.com/sucesos/descuartizamiento-nueva-marca-crimen-Venezuela_0_480551960.html
No hay comentarios :
Publicar un comentario