Llamadas de emergencia policial
Fundamerced
Caracas - 15 de Septiembre de 2014
La inseguridad impera en Venezuela. En lo relativo
a la seguridad personal, comunicarse con la autoridad policial implica conocer
a cuál le corresponde atender una llamada de auxilio; el territorio ha sido
dividido en “cuadrantes” y a cada uno de éstos "cuadrantes” se les han asignado
números telefónicos a los cuales se ha de discar para que las llamadas de
auxilio sean atendidas. No es cómo en casi cualquier otra parte, dónde hasta
niños de pecho discan hasta desde teléfonos móviles celulares un número
específico, como pudieran ser el 911 ó el 112, y son atendidas sus llamadas de
emergencia.
No, en Venezuela tenemos “cuadrantes”
por doquier:
Nuestra división político territorial implica la existencia de 335 municipios,
pero éstos 335 municipios están divididos a su vez por “cuadrantes”; esto
implica a su vez que entonces no serían 335 números telefónicos distintos para
llamar a emergencia, sino que se deberían conocer igualmente los cuatro o cinco
números telefónicos asignados por “cuadrante”, lo cual implicaría que cada
quién debería cargar consigo una “pequeña” agenda con más de 1.500 números telefónicos
para poder llamar a la policía, o no salirse de su propio “cuadrante” y aprenderse
los cuatro o cinco números que le están asignados, o caminar, viendo hacia los
postes, pues allí están colocados visiblemente, en muchos sitios, mediante
pancartas alusivas, los números telefónicos de cada "cuadrante"
Debe imponerse un número único telefónico para
llamar a emergencia, independientemente del tipo de telefonía utilizada, sea
móvil celular, o fija; e independientemente del tipo de emergencia, sea
policial, auxilio vial, o médico-asistencial, o que llame por un incendio: Supongamos
que viaja por carretera, y se accidenta: ¿Para llamar a la policía
necesariamente deberá conocer entonces dónde se encuentra, para así saber cuál
es el número que deberá discar? Pongamos por caso que viaja por la Autopista Regional
del Centro, y no se conoce el nombre de ninguno de los pueblos que son
divisados desde la autopista y sólo conoce en que parte del tramo se encuentra,
gracias a los identificadores de kilómetro: ¿Cómo haría usted para saber cuál es el número
que debe discar, sí está en medio de la vía, expuesto a los riesgos de los
asaltantes de carreteras?...Sí deambula por la Gran Caracas, y lo hace por la
confluencia de los municipios Baruta, Chacao y Libertador, pues casualmente va
por la Principal de Las Mercedes, ¿a quién va a llamar en caso de emergencia?...y
sí marcha en Metro, viene desde Los Teques y lo atracan antes de llegar a Las
Adjuntas: ¿a quién llama?...y sí lo atracan en cualquier línea del Metro: ¿Cuál
es el número que debería discar para que su emergencia sea atendida?
El número telefónico único debe imponerse como una
sana medida hasta de política criminal. Su implementación puede coexistir con
la idea de los cuadrantes, así como con el plan denominado “patrullaje
inteligente”.
Aún más, propondríamos que al equipo de servidores
públicos se unan los pertenecientes al Poder Judicial, así como los del
Ministerio Público, pues el hampa no descansa ni toma vacaciones; está activa
los 365 días del año, ininterrumpidamente.
De este modo, se implementaría una oficina que
actuaría como central telefónica local, atendida por personal administrativo, distinto
al policial o al militar, y esta central telefónica reportaría las llamadas de
emergencia al personal adscrito a los cuadrantes, a quienes seguiría
correspondiendo las labores de patrullaje y prevención. Por supuesto, todas las
llamadas a ese número telefónico único deberían ser “ruteadas” o “enrutadas” digitalmente
mediante sistema de telecomunicaciones ya existente. Tanto el Poder Judicial como el Ministerio Público serían garantes del funcionamiento del sistema así propuesto, pues uno y otro deberían permanecer constantemente las 24 horas del día, los 365 días del año, como soldados, al pie del cañon, coordinando acciones desde un Centro de Apoyo que debería implementarse en todas y en cada una de las centrales telefónicas que deberían ser puestas en funcionamiento: Tenemos 335 municipios, deberíamos tener entonces al menos 335 centrales telefónicas locales, con sus correspondientes Centros de Apoyo, conformados entre otros por personal proveniente de los ya señalados Poder Judicial y Ministerio Público; ya el personal de nuestra Policía Científica labora por guardias, al igual que el personal de la PNB y la GNB.
La propuesta así esbozada es perfectible: Habrá de ser adecuada a las necesidades propias e intrínsecas de cada "cuadrante"; pero en el fondo se pretende que a la ciudadanía sea prestado auxilio las 24 horas del día, los 365 días del año; y no sólo desde lunes a viernes, y en horas de oficina o de despacho.
Siendo así, la próxima vez que “salga” de su propio
“cuadrante” podrá tener al menos la certeza de conocer cuál es el número que
habrá de discar para que su llamada de emergencia sea atendida. Esperemos que activen a tales efectos ese número telefónico único, 911 ó 171; pero un único número para todo el territorio nacional.
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