El gobierno alemán quiere que este hombre deje de tirarse a su perrita
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| Michael Kiok y su perrita/pareja sexual. |
Hacer el amor con animales no es una actividad tan ilegal como pueden pensar (pueden ver nuestro documental sobre los colombianos que aman mucho a sus burritas). Se sorprenderían de saber que en Alemania es completamente legal coger con animales, desde 1969. [En México, el término "zoofilia" apenas y se ha mencionado en la cámara de senadores de forma torpe, como todo lo que suele mencionarse ahí].
Pero parece que recientemente el parlamento alemán quiere prohibir la
zoofilia, porque, según alegan, esta actividad es perjudicial para las
personas que la practican —ya sea con consentimiento del bicho o sin él—
y su práctica provoca la muerte de 500 mil animales al año. Por eso el
gobierno busca establecer un proyecto de ley que penalice la zoofilia.
De aprobarse, la nueva ley empezaría a tener vigencia a partir de
diciembre de este año y tendría una fianza de unos 30 mil euros a quien
sea hallado culpable por este delito.
Michale Kiok, de la organización zoófila ZETA, forma parte de un grupo que lucha en favor de las personas que gustan de tener sexo con sus caballos. Él se ha opuesto públicamente a esta ley. Así que decidí llamarlo para ver qué tanto afectará esta nueva ley a él y a sus amigos zoófilos.
VICE: Hola, Michael. ¿Qué opinas de esta nueva ley contra el bestialismo?
Michael Kiok: Son tonterías. Los animales viven en el mismo grupo social que nosotros y viceversa. Somos parte de la misma manada.
Michael Kiok: Son tonterías. Los animales viven en el mismo grupo social que nosotros y viceversa. Somos parte de la misma manada.
VICE: Ok, es una teoría interesante. ¿Esta ley los lanzará al terreno de la ilegalidad?
Michael Kiok: No. Los psicólogos han estudiado a 120 zoófilos y han descubierto que la zoofilia es una simple orientación sexual: no podemos reprimir ese sentimiento. Después de llevar una vida marital conforme a los estatutos sociales durante diez años, me divorcié y decidí dejar de quejarme por el rol que la sociedad me había atribuido.
Michael Kiok: No. Los psicólogos han estudiado a 120 zoófilos y han descubierto que la zoofilia es una simple orientación sexual: no podemos reprimir ese sentimiento. Después de llevar una vida marital conforme a los estatutos sociales durante diez años, me divorcié y decidí dejar de quejarme por el rol que la sociedad me había atribuido.
VICE: ¿No crees que es un poco tarde para aprobar esta ley?
Michael Kiok: Ya ha habido leyes similares en el pasado, pero la prohibición del contacto sexual entre humanos y animales se abolió en 1969 porque la filosofía de la ley penal cambió: antes todo se fundamentaba en la moral, pero ahora se toma más en cuenta no invadir los derechos de otra persona. No fue sino hasta hace muy poco que los zoófilos empezamos a ser perseguidos.
Michael Kiok: Ya ha habido leyes similares en el pasado, pero la prohibición del contacto sexual entre humanos y animales se abolió en 1969 porque la filosofía de la ley penal cambió: antes todo se fundamentaba en la moral, pero ahora se toma más en cuenta no invadir los derechos de otra persona. No fue sino hasta hace muy poco que los zoófilos empezamos a ser perseguidos.
VICE: ¿Cuál es la diferencia entre zoofilia y bestialismo?
Michael Kiok: Los zoófilos, aman a los animales, tienen sentimientos verdaderos por ellos. Y si el animal lo permite, ambos desarrollan una relación sexual. Algunas personas son consideradas como bestialistas porque solamente les interesa el sexo. Ellos son amables con el animal pero no conciben volverse su pareja. Además existe una minoría de personas que abusan sexualmente de los animales. Se les conoce como zoosádicos y nosotros no aprobamos en ningún caso este comportamiento.
Michael Kiok: Los zoófilos, aman a los animales, tienen sentimientos verdaderos por ellos. Y si el animal lo permite, ambos desarrollan una relación sexual. Algunas personas son consideradas como bestialistas porque solamente les interesa el sexo. Ellos son amables con el animal pero no conciben volverse su pareja. Además existe una minoría de personas que abusan sexualmente de los animales. Se les conoce como zoosádicos y nosotros no aprobamos en ningún caso este comportamiento.
VICE: ¿Crees que las personas tienen una falsa imagen de ustedes?
Michael Kiok: Sí, algunos nos llaman criminales y torturadores. Recientemente una treintena de personas llegó a mi casa para gritarme degenerado. Lo que es interesante es que más de 90% de estos fanáticos son mujeres.
Michael Kiok: Sí, algunos nos llaman criminales y torturadores. Recientemente una treintena de personas llegó a mi casa para gritarme degenerado. Lo que es interesante es que más de 90% de estos fanáticos son mujeres.
VICE: ¿A qué crees que se deba esto?
Michael Kiok: Yo creo que las mujeres ven los animales como niños y a sus ojos, los niños no deberían tener una vida sexual. Estas mujeres son verdaderas castradoras, piensan que los hombres son unos brutos que quieren dañar a los niños y a los animales. Ellas piensan que uno viola animales, pero estoy convencido de que la zoofilia es una práctica que puede realizarse tanto por hombres como por mujeres.
Michael Kiok: Yo creo que las mujeres ven los animales como niños y a sus ojos, los niños no deberían tener una vida sexual. Estas mujeres son verdaderas castradoras, piensan que los hombres son unos brutos que quieren dañar a los niños y a los animales. Ellas piensan que uno viola animales, pero estoy convencido de que la zoofilia es una práctica que puede realizarse tanto por hombres como por mujeres.
VICE: ¿Puedes decirnos algo sobre los burdeles de animales?
Michael Kiok: En 2005, un periódico danés escribió que los daneses viajaban a Alemania para frecuentar estos burdeles. Aunque la asociación que supervisa los albergues de animales en Alemania ha declarado no saber nada al respecto, muchas personas declaran la existencia de estos lugares. El parlamento pidió cuentas sobre esto, pero la policía no encontró nada. Nosotros no conocemos ninguno y, créanme, seríamos los primeros en estar al tanto si estos burdeles animales existieran.
Michael Kiok: En 2005, un periódico danés escribió que los daneses viajaban a Alemania para frecuentar estos burdeles. Aunque la asociación que supervisa los albergues de animales en Alemania ha declarado no saber nada al respecto, muchas personas declaran la existencia de estos lugares. El parlamento pidió cuentas sobre esto, pero la policía no encontró nada. Nosotros no conocemos ninguno y, créanme, seríamos los primeros en estar al tanto si estos burdeles animales existieran.
VICE: ¿Qué tienes que decir sobre los que creen que los animales no pueden dar su consentimiento?
Michael Kiok: En parte tienen razón. Bien entendido, es muy posible forzar a un animal, pero eso lo calificamos como una violación. Los zoófilos tienen una ética también. Una de las reglas elementales es jamás forzar a un animal y, sobre todo, no atacarlo. Siempre se debe dar al animal la posibilidad de negarse o de irse. Si tú te quieres pasar de listo con una perra, te saltará al rostro y se pondrá a ladrar. Una yegua puede darte una patada, cosa que no tiene nada de divertido.
Michael Kiok: En parte tienen razón. Bien entendido, es muy posible forzar a un animal, pero eso lo calificamos como una violación. Los zoófilos tienen una ética también. Una de las reglas elementales es jamás forzar a un animal y, sobre todo, no atacarlo. Siempre se debe dar al animal la posibilidad de negarse o de irse. Si tú te quieres pasar de listo con una perra, te saltará al rostro y se pondrá a ladrar. Una yegua puede darte una patada, cosa que no tiene nada de divertido.
VICE: ¿Algún animal se te ha insinuado?
Michael Kiok: Sí. A mi perra casi no le gusta el sexo, pero le gusta que la dedee. Ella viene a mí cuando estoy acostado en mi sillón, se pone sobre mi costado y jala mi mano hacia su vientre, con la pata. Es entonces cuando sé que ella quiere que estimule su vagina. De la misma manera, un perro intentará cogerte.
Michael Kiok: Sí. A mi perra casi no le gusta el sexo, pero le gusta que la dedee. Ella viene a mí cuando estoy acostado en mi sillón, se pone sobre mi costado y jala mi mano hacia su vientre, con la pata. Es entonces cuando sé que ella quiere que estimule su vagina. De la misma manera, un perro intentará cogerte.
VICE: ¿De verdad hacen eso?
Michael Kiok: Naturalmente. Tal vez te resulte repugnante, pero no a los zoófilos. Ellos estarían felices, se arrodillarían y atenderían esa reacción.
Michael Kiok: Naturalmente. Tal vez te resulte repugnante, pero no a los zoófilos. Ellos estarían felices, se arrodillarían y atenderían esa reacción.
Ooooooh.
VICE: ¿Qué animal es el más sexy?
Michael Kiok: Algunos zoófilos se sienten atraídos por los perros o los caballos, a veces por los dos. Hay de todo, en todo el mundo. Los animales más populares son el perro, la yegua, la perra y el caballo, en ese orden.
VICE: Yo creía que coger con caballos representa un peligro mortal.
Michael Kiok: En cuanto a estos, las relaciones sexuales no necesariamente llegan hasta el final. Algunos lo hacen, pero hace algunos años un tipo murió porque un caballo le perforó el colon. Es mejor acariciar al caballo, acostarse a un lado de él y masturbarlo.
VICE: Oh, eso parece muy romántico. ¿Qué hay de los animales exóticos?
Michael Kiok: He escuchado historias de gente que tenía relaciones con serpientes, pero jamás conocí a nadie que lo hiciera. Una vez conocí a alguien que tenía relaciones con una tigresa.
VICE: ¡Verga!
Michael Kiok: Sí. Pero el animal murió, por desgracia.
VICE: ¿Conoces a alguien que se cogió a una tigresa hasta matarla?
Michael Kiok: No, se murió se vieja. Ellos se conocían bien y estaban enamorados.
VICE: Creo que tengo que parar, por el momento. Muchas gracias.
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